Situando las cosas en
su sitio
Nunca es fácil escribir un texto en el que uno tiene que
referir experiencias muy personales o motivaciones íntimas de sus actos, porque
a todos nos causa un cierto pudor el ver reflejadas estas cosas en papel impreso.
Y si además lo que se escribe se refiere a momentos que ya van quedando lejanos
en el tiempo y brumosos en la memoria, la cuestión se vuelve un tanto peliaguda.
Pero a pesar de ello me ha parecido muy bonita la
petición de la Delegación
de Misiones de recoger en un pequeño libro la experiencia misional de los que
hemos tenido la suerte de dedicar una parte de nuestra vida, aunque haya sido
pequeña, como en mi caso, a servir a la Iglesia y a nuestros hermanos en las jóvenes
iglesias de los países de misión.
En
mi caso todo partió de una inquietud difusa que se iba adentrando en mí durante
mis años de formación sacerdotal en la Universidad de Comillas, en el trato con algunos
compañeros seminaristas de otros países y también de algunos sacerdotes
jesuitas que habían trabajado en la misión. ver más
0 comentarios:
Publicar un comentario